El magíster Héctor Arce, director del Concurso Villarreal Emprende, explicó que el Programa Villarreal Incuba estará operando presencialmente desde este año. Lenin Castilla, miembro del equipo ganador del año pasado, manifestó su deseo de ser acoplado en esta incubadora de empresas
Por: María Espinoza y Anghel Espinoza
El peruano se caracteriza por ser creativo, trabajador y tener ideas innovadoras para salir adelante. Por ello, existen emprendimientos impulsados por jóvenes que ponen en marcha esas ideas. Sin embargo, en ocasiones, no cuentan con el capital inicial para desarrollar sus proyectos de negocio. En ese sentido, se lanzó el Concurso Villarreal Emprende para brindar un apoyo inicial a los villarrealinos que quieren hacer realidad su emprendimiento y así poder mejorar la sociedad.
La Oficina Central de Innovación, Desarrollo y Emprendimiento (OCIDE) del Vicerrectorado de Investigación (VRIN) de la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV) anunció el V Concurso Villarreal Emprende que inició el 4 de octubre con las inscripciones y terminará el 16 de diciembre con la premiación de los ganadores. Los estudiantes de pregrado y posgrado pueden inscribirse hasta el 8 de noviembre.
El objetivo de la competencia es premiar la innovación y el emprendimiento estudiantil en la UNFV. Ante ello, Pluma Villana entrevistó al Mg. Héctor Arce Giraldo, director de la Incubadora de Empresas de la UNFV y del V Concurso Villarreal Emprende para que nos brinde más detalles.
¿Cuál es la finalidad del concurso?
El Concurso Villarreal Emprende, ya este año 2022, tiene su quinta edición. El concurso es una forma de acercar a la comunidad universitaria villarrealina al desarrollo y la gestión del emprendimiento de una manera directa. Consiste en tocar la puerta y solicitar a todos los estudiantes que participen, que se involucren, que vean el emprendimiento como una opción, y que presenten sus ideas y modelos de negocio innovadores. A partir de ahí, sembrar un poco esa semillita, esa intriga de qué podría pasar.
Eso es lo que principalmente tratamos de hacer con el concurso que está abierto a todos los estudiantes, tanto de pregrado como de posgrado de la universidad. La idea es que formen equipos, de preferencia multidisciplinarios, donde alumnos y alumnas de las diferentes facultades puedan integrarse y encontrar un espacio común, buscando una idea que pueda quizás significar un cambio para toda la sociedad y, por qué no, hacer plata en el proceso.
¿Qué beneficios trae este concurso para la universidad y los alumnos?
Realmente la idea es el beneficio para el estudiante, ya cualquier cosa que beneficie a nuestros estudiantes es un beneficio para la universidad. La idea de complementar una malla curricular con actividades como esta es brindarle al estudiante una mirada un poquito más amplia, una perspectiva un poquito más grande de qué es lo que puede hacer con las competencias que va desarrollando en su experiencia académica.
En ese sentido, nosotros buscamos crear estos espacios donde se pueda dar la oportunidad a que los estudiantes puedan seguir interactuando y desarrollando estas nuevas capacidades, creando así una caja de herramientas que les permita ver, de una manera distinta, cómo enfrentar el mundo desde el área en la cual ellos han decidido desenvolverse.
¿A qué ámbitos deben pertenecer las propuestas de los concursantes?
Hay una idea en el mundo con respecto a los emprendimientos que busca quebrar unas corrientes tradicionales. Es decir, lo que nosotros buscamos con el concurso es un emprendimiento de alta escalabilidad. ¿Qué significa eso? Nosotros tenemos, por un lado, emprendimientos muy comunes en todo el Perú. El peruano es una persona muy emprendedora y normalmente ese camino que toma encaja dentro de modelos que ya han sido probados. Por ejemplo, abrir una ferretería, un restaurante, una lavandería, dedicarte al negocio del Corte y confección, tener una tienda en Gamarra, lo que llamaríamos una PYME, micro, pequeñas y medianas empresas que tienen modelos de negocio tradicionales.
Si bien no estamos diciendo que esto sea malo, lo que buscamos va más en la línea de un emprendimiento de alta escalabilidad. En el caso de un negocio con un modelo escalable, una startup como se le llama en el mundo, lo que tenemos es un modelo probablemente incierto que no ha sido probado, que no tiene unas hipótesis necesariamente validadas y ahí es donde se encuentra la posibilidad del potencial para crecer mucho más que con un negocio tradicional.
Entonces, por ese lado, eso es un poco lo que buscamos nosotros, equipos de estudiantes que vengan con una inquietud, un problema que hasta ahora no se haya resuelto bien o que no se haya resuelto. La idea es llegar a estas ideas disruptivas.
¿La universidad, aparte del apoyo monetario, le dará seguimiento a la realización del proyecto?
Nosotros hasta el 2019 pensábamos en los términos del concurso Villarreal Emprende como un espacio de sensibilización y de difusión. Pero desde el 2020, hemos ido construyendo un espacio que es la nueva incubadora de empresas de la universidad, que ya tiene un local, mobiliario y equipos.
Estamos en el anexo 7 en el pabellón que corresponde a las dependencias del Vicerrectorado de Investigación, en la Avenida Óscar R. Benavides, ex Colonial 450 para los que nos quieran visitar una vez que ya la normalización de las actividades nos lleve hacia un contexto presencial.
La idea es que este año, con la promesa en ciernes de que el próximo vamos a estar operando presencialmente, no solo los ganadores, sino los finalistas, puedan acceder a los servicios de una incubadora de empresas. Allí van a poder capacitarse, contar con un espacio muy bonito que tenemos, un área de coworking, sitios donde reunirse con mentores, ya sea mentores internos de la universidad o mentores externos, y poder hacer un seguimiento. Y que ellos también vean ese avance y que le puedan dedicar ese tiempo con los servicios que nosotros le vamos a dar: Wi-Fi, fotocopiadora, incluso los servicios de nuestro laboratorio de fabricación digital, en caso de que vayan a realizar algún prototipo que sea físico, y que todo el ecosistema vaya creciendo. También que se beneficien de los efectos del networking, poder ir a conversar con otros emprendedores, tener eventos donde se puedan reunir y tomarse una gaseosa, un café o un trago con potenciales inversionistas, donde nosotros podamos convocar a ese capital de riesgo que está buscando las nuevas ideas. Eso es lo que esperamos poder lograr ya en el 2023. Así que sí, hay más, hay un camino que viene más allá de la declaratoria de ganadores, que se realizará el 16 de diciembre.
¿Quiénes serán los jurados del concurso?
Todavía no se los puedo decir porque eso usualmente lo manejamos un poquito más adelante. Las agendas, a veces con mucha anterioridad, suelen jugarnos trampa. Diciembre es un mes difícil y complicado para muchas personas porque hay muchas cosas que hacer, para la Villarreal es prácticamente el inicio del siguiente semestre del 2022. Entonces, todavía tenemos en la cabeza varios nombres, pero no hemos aterrizado con una invitación formal.
Lo que sí debe quedar siempre claro es que las personas que queremos invitar están relacionadas con temas de emprendimiento, de innovación y que tienen unas perspectivas no solamente académica de las cosas, sino de experiencia en el mundo laboral real.
¿Qué les recomendaría a todos los estudiantes de Villarreal que quieren salir y desarrollar sus propios proyectos a futuro?
Busquen un problema que les interese resolver. Creo que esa es una de las cosas básicas. No es una frase mía, está en sinfín de libros, en sinfín de conferencias de personas que saben de emprendimiento y que han vivido el emprendimiento mucho más tiempo y de manera más intensa que yo, pero sí, yo creo que eso es lo más importante, enamórate del problema. La forma de resolverlo va a venir con esfuerzo, con investigación, con ganas, con dolores de cabeza, pero siempre con muchas ganas. Entonces eso tiene que ser el norte, querer resolver un problema y validar las hipótesis alrededor de eso.
Lo segundo, encuentra buena gente con quien ir por ese camino, ármate un buen equipo. Los emprendedores villarrealinos tienen gran potencial. Yo lo he visto, aún nosotros sin ser una universidad que haya tenido cursos de emprendimiento o talleres o cosas grandes, cuando comenzamos a trabajar en la OCIDE, empezaron a aparecer agrupaciones estudiantiles que nos dieron una enseñanza muy clara, el emprendimiento ya está en el villarrealino y la villarrealina. Nuestros equipos han ido a concursos y ganado primeros lugares, segundos lugares y no solamente un año, sino año tras otro. Entonces ahí está el potencial. El mundo nos está diciendo que tenemos que tomar más en serio el tema del emprendimiento.
El magíster Arce realizó una invitación a los villarrealinos para que se inscriban y participen en el concurso Villarreal Emprende.
Antecedentes
El ganador del IV Concurso Villarreal Emprende fue el proyecto Yanapax, de los estudiantes Lenin Castilla Llacta, Jhanina Flores Quesquén, Renatto Oyague Guerra, Kevin Luján Bernaola y Estéfano Vilela Zárate, quienes obtuvieron 1500 soles, como premio por el primer lugar.
Pluma Villana conversó con Lenin Castilla, estudiante de noveno ciclo de Ingeniería de Sistemas, quien nos contó su experiencia como concursante y ganador de Villarreal Emprende.
¿Cómo se enteraron del Concurso Villarreal Emprende?
Nos enteramos del concurso porque fue parte de un curso que nosotros llevamos que es Software. El ingeniero a cargo nos presentó la propuesta, pero lo soltó como una idea al aire. Ya teníamos un grupo establecido y una idea de negocio más o menos establecida. En ese entonces, ya estábamos desarrollando un software y vimos esta oportunidad como una manera de poder medir qué tanto habíamos avanzado en el desarrollo del software. Así que, decidimos presentarnos al concurso.
¿En qué consistió la idea de su emprendimiento?
Nuestro emprendimiento era un sensor para accidentes en vehículos menores. Como en toda esa época de la pandemia el uso de vehículos menores, como son bicicletas, scooters, patines, se incrementaron. Entonces nosotros vimos ahí un nicho donde podríamos aplicar tecnología para la salud. Entonces, Yanapax que es nuestro proyecto en sí trataba de eso. Un sensor que detectaba cuando una persona ha tenido un accidente, esta se conectaba a su teléfono móvil y enviaba una alerta a los hospitales y comisarías más cercanas.
Cuando fueron parte de los 5 finalistas del concurso y tuvieron que exponer en 5 minutos su idea de negocio a los jueces, ¿cómo se sintieron?
Ese es un reto muy grande, ya que la idea se trabajó casi aproximadamente por 2 meses, porque ya la veníamos trabajando antes y resumir todo esto en unos 5 minutos fue muy complicado. Recuerdo que en las reuniones previas a la presentación final estábamos viendo con mi equipo la forma más fácil de mostrar todo y que sea entendible, porque al ser 5 minutos uno comienza a correr en la forma de explicar, pero entonces no se iba a ver bien la idea. Pero al final, resumimos en unas diapositivas, en unos videos, y en imágenes más que todo la idea que queríamos plasmar: prevención de muertes por accidente. Entonces, con esta idea base, nosotros presentamos la solución, que era el sensor que nosotros desarrollamos.
Ya ha pasado un tiempo desde que recibieron el insumo base para iniciar su emprendimiento. Actualmente, ¿cuál es el estado de su emprendimiento?
Luego de que nosotros ganamos el concurso, quería recalcar también esta parte porque Héctor Arce, que es uno de los organizadores de Villarreal Emprende, justo ahora último participamos en una Hackathon con el mismo equipo y con los mismos organizadores que fue Héctor. Entonces justo le comentaba que llegué hasta la parte de casi patentar la idea del equipo. Nosotros ganamos el concurso, como estamos en época de pandemia y seguimos en época de pandemia, no habían desarrollado tanto el Programa Incuba, que ahora sí lo están desarrollando, solo llegamos a la parte de casi patentarlo. Estábamos con la Oficina de Patentes de la Universidad, tuvimos reuniones, estuvimos conversando con las personas encargadas, planteamos la idea mejor, ya un poco más calmado porque no era un concurso sino ya era parte de seguir desarrollando el proyecto y nos hemos quedado en esa parte, aún en la parte de desarrollar un tipo de patente para este modelo de uso de este sensor, porque ya no es una invención porque los sensores ya existen, sino que nosotros le estamos dando una aplicación en cierta área.
Entonces, el proyecto va ahí. Lo que pienso hacer, porque justo estaba en esta Hackaton que hubo para la web de la UNFV y estuve conversando con Héctor, él me comentaba que está haciendo Villarreal Emprende versión cinco, que es uno de sus proyectos más ambiciosos porque no ha habido un año donde él no lo haya desarrollado. Entonces, como ahora ya pasó un poco la pandemia y podemos regresar a la presencialidad, me comentaba que los participantes ya iban a pasar directamente al programa en Incuba. Esto es algo a lo que quisiera aspirar, ya que el Programa Incuba te brinda un poquito más de facilidades, te brinda espacios para poder trabajar, un poco más de apoyo económico, entonces quisiera que ese sea el próximo paso también del proyecto.
¿La universidad aparte del apoyo monetario, le dió seguimiento a la realización del proyecto?
En primer lugar, sí. Después de que ganamos, nos ofrecieron todo este tema de la patente pero en sí la universidad… Sí me hubiera gustado o sí me gustaría todavía que nos llame al programa Incuba, que es el siguiente paso.
El programa Incuba se encarga de apoyarnos hasta que esté hecha realidad la idea que nosotros plasmamos en el proyecto en sí. Entonces, por esa parte no hemos tenido tanto seguimiento. Si quisiera que nos puedan acoplar al programa Incuba.
¿Qué recomiendas a los villarrealinos que deseen emprender?
Primero que lo intenten. Héctor me comentaba que los concursos que él hace o que organiza la universidad en la parte de investigación no tienen mucha acogida. En la Hackathon Web que estuvimos nosotros estuvimos tres equipos participantes, pero la Hackaton tenía la idea de renovar toda la página web de la Universidad. Es algo en lo que todos quisieran participar, así que primero les mencionaría que puedan participar, que se enteren de los concursos, que asistan a los concursos. Las oportunidades están, los concursos están. La universidad en la parte del principio te apoya y ahora, como yo lo entiendo por la pandemia, no ha tenido mucho seguimiento, pero me dicen que ya van a poner todo de su parte ahora que vamos a regresar a la presencialidad para poder seguir apoyando estos nuevos proyectos. Me estaba invitando también Villarreal Emprende. Le dije que estoy armando el equipo para poder presentarme y que las puertas están abiertas a todos los que quieren innovar.
Todos tenemos una idea, digámoslo así, loca para para un proyecto que se necesita y existen las ventanas para para poder mostrarlo.
Especificaciones
El V Concurso “Villarreal Emprende” busca fomentar la generación de modelos de negocio innovadores por parte de los estudiantes y ex estudiantes villarrealinos. También, tiene como objetivo crear un espacio para el desarrollo del ecosistema emprendedor universitario y premiar las iniciativas emprendedoras creadas por equipos multidisciplinarios de alumnos.
Requisitos
Los equipos a inscribirse deben estar conformados entre tres a cinco estudiantes de, por lo menos, dos facultades diferentes. Además deberá tener matrícula vigente en programas de pregrado o posgrado de la UNFV durante el año 2022.
El líder del equipo deberá llenar y enviar el formulario de inscripción hasta el 8 de noviembre a las 4 p.m. También, deberá descargar el ensayo de plan y negocios y enviarlo al correo electrónico ocide@unfv.edu.pe.
El plan debe redactarse con un máximo de 700 palabras de acuerdo con la metodología de Lienzo de Modelo de Negocio, la cual debe presentar una propuesta de valor, segmento de clientes, canales, relación con clientes, actividades clave, recurso clave, fuentes de ingreso, socios clave y estructura de costos.
Para más detalles, visita la página oficial del Concurso Villarreal Emprende
Cronograma del concurso
El V Concurso Villarreal Emprende es una oportunidad para que estudiantes villarrealinos desarrollen su capacidad emprendedora. La universidad debería difundir más este tipo de concursos que traen beneficios para toda la comunidad villarrealina. De igual manera, los mismos alumnos deben animarse a participar en esta clase de concursos que son una oportunidad para que sus ideas se puedan convertir en realidad.
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